Precipitación consciente de lo que deseas | Jesús

Nota de yosoyespiritual.com: Siempre es importante estar al tanto de los beneficios de un trabajo espiritual disciplinado, tanto en nuestra vida cotidiana como en los momentos de silencio a solas con nuestra presencia interna. Siempre que queremos manifestar o precipitar alguna cosa o situación en el mundo de la forma, es más fácil cuando hacemos méritos por que se realice. El Maestro Jesús nos trae la siguiente enseñanza.

Es siempre más fácil precipitar algo que el individuo ya haya visto y con lo cual su conciencia externa está familiarizada. Cuando el individuo entra al uso mayor del poder de la precipitación, se eleva por encima de las cosas que ya han sido manifestadas, y entra al ámbito donde habita la perfección todavía no expresada de la Tierra.

Cuando un individuo ha aprendido verdaderamente a controlar los pensamientos y sentimientos, es armonioso. Esto abre su conciencia externa a la Perfección Divina que está siendo dirigida hacia él, y con mucha más facilidad puede proceder a precipitar esas bendiciones del Reino del Padre de las cuales se ha escrito: “Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni se han sentido en el corazón del hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman”. Aquí “el ojo de la mente” de la conciencia externa registra, memorias etéricas de perfección atestiguadas ya sea entre encarnaciones o en las estadías en los Templos de Luz mientras que el cuerpo duerme. Estas pueden ser entonces precipitadas a la forma, expandiendo, así, el Reino del Cielo en la Tierra.

Para que esto tengo lugar, es menester que la consciencia activa del hombre esté en constante contacto con las realidades de las esferas superiores por medio de la meditación, la respiración y el amor. Y en consecuencia, aquello que percibe en los mundos superiores no tardará en manifestarse en su propio mundo.

Tomado del libro: Diario del Puente a la Libertad –  Jesús – pag 115

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