Podemos decir con verdad que el mundo físico cede lentamente ante la Voluntad Divina, pero debe ceder porque la presión del Plan Divino respaldada por el Poder del Elohim no conoce oposición. La extraordinaria masa de energía generada por los seres humanos no despiertos, es un mar de aspecto turbio moviéndose lentamente, que está siendo impulsado hacia atrás y hacia abajo, mientras la Luz Pura del Día Celestial siempre se acerca más a la Tierra. ¡Esta presión concentrada de la Luz desde lo alto sobre el mal auto-creado de la humanidad, forma un estado caótico para aquellos que están entre o debajo de la presión terrible; y ésta será peor antes de que sea mejor!
Todos los hombres sienten este estado de infelicidad e inquietud, pero de acuerdo a su generación de esta fuerza maligna, es experimentado su retomo sobre ellos. Ustedes pueden hacer mucho para aliviar el karma de aquellos a su alrededor que están siendo amientes de sus propias creaciones, Investidos con la Misericordia y Amor, sus llamadas pueden elevarse por Misericordia y Amor y por la disipación de esas nubes mediante la Luz sin el sufrimiento indebido de las masas.
¡Sólo existe un Verdadero Estado Eterno del Ser, una conciencia de Perfección constantemente sostenida y mantenida! Esta conciencia gloriosa y confortable es lo que se denomina como la Octava Maestra Ascendida. En la Octava de los Maestros Ascendidos todos somos ¡UNO! Eso significa que cada corriente de vida consciente que ha alcanzado esta conciencia de Perfección, no reconociendo nada más, tiene un concepto verdadero de la realidad del Universo y de todas las cosas afines. Cada uno de tales individuos, mediante el esfuerzo consciente, mantiene un estado de pensamiento y sentimiento en el cual no se le permite vivir a la imperfección y de ese modo todos los hombres y mujeres en este estado son UNO en pensamiento y sentimiento de parecer.
La única separación entre su octava y la Mía descansa en el hecho de que ustedes creen en el mal y el bien y no se han elevado conscientemente hasta el punto donde sólo la perfección impregne cada átomo y célula de su vida consciente. Si quieren acercarse a la unión con Mi Luz y Octava, deben cultivar el hábito – no sólo mentalmente – sino de un sentimiento de perfección cada segundo de cada día. ¡Moren en la Perfección hasta que se conviertan en un Perfeccionista tal que todo lo que contacten, mediante la presión de su sentimiento, manifieste esa Perfección!
Cuando lleven puesta la Túnica Dorada de Mi Silencio y cuando ustedes conscientemente insistan sobre su mundo de sentimiento, su cuerpo etéreo y estado mental, no aceptando nada sino la Perfección, encontrarán que progresarán rápidamente.
La sabiduría de las edades, Puente a la libertad – Maestro ascendido Kuthumi