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Liberar la vida a punta de amor | Francés K. Ekey

La gloriosa Llama de la Ascensión es custodiada y expandida por la Hermandad del Templo de la Ascensión, establecido en Luxor, Egipto. Esta Llama es una corriente REAL MOVIENTE y ASCENDENTE DE ENERGÍA mediante la cual cualquier miembro del género humano, ángeles encarnados y hasta elementales pueden completar su ciclo de servicio en o alrededor de la Tierra y entrar a su Estado Divino natural. No vayamos a considerar que la actividad de esas Llamas es efímera, abstracta y visionaria. Estas Llamas son focos, magnetizados por alguna Inteligencia Divina, sostenidos por el Amor de estas Inteligencias, e irradiado hacia adelante a través de las cuatro esferas inferiores (emocional, mental, etérica y física) para alimentación e iluminación espiritual de todas las evoluciones que actualmente utilizan la Tierra y su atmósfera como salón de clase.

ACTIVIDAD EN ATLÁNTIDA

Cuando la gloriosa civilización Atlante comenzó a declinar, cuando los poderes de invocación fueron utilizados para propósitos egoístas y engrandecimiento personal, la Gran Hermandad Blanca hizo planes para asegurar estos focos de la Llama en la parte de la superficie seca de la Tierra que estaba destinada a permanecer por encima de Ias olas de purificación, cuando el elemento agua fue comandado a contribuir a la inmersión de este continente que una vez fuera bello.

En Atlántida, los templos donde se albergaban las Llamas (que representaban las Virtudes de Dios) eran edificios físicos y tangibles. La Hermandad Blanca y los iluminados de esa era a menudo concurrían a uno de los Templos que contenía la Llama de la virtud que deseaban, para obtener fortaleza adicional, poder y la esencia Irradiante vitalizadora de dicha Virtud. Esos tiempos regresarán en un futuro no muy distante.

Uno de los escogidos para asumir la responsabilidad de sostener el foco de la Llama de la Ascensión en la Tierra se le conoce ahora bajo el nombre de Serapis Bey, Chohán (Señor) del Cuarto Rayo. En la Atlántida, él era un sacerdote de la Hermandad Blanca que voluntaria y conscientemente enfocó Su atención sobre la posibilidad de la ascensión para todos aquéllos que escogieran regresar a su Estado Divino. En el mundo de las apariencias físicas, Dios necesita los cuerpos de quienes estén dispuestos a magnetizar e irradiar Sus Virtudes a través de la raza humana. Así, las diversas órdenes del sacerdocio se mantenían adheridas a las Virtudes a las cuales habían decidido sus vidas, servicios, invocaciones, aplicaciones y ministraciones.

¡La mismísima naturaleza de la Llama es elevarse! Por tanto, a menos que alguna corriente de vida no-ascendida continúe invocando diariamente la Llama de la virtud deseada, de esa manera magnetizándola y sosteniendo su actividad aquí mismo en el mundo de las apariencias físicas, esa virtud se elevará a su propia octava “en el aura del Altísimo”.

Cuando la isla de Poseidonis fue destinada para hundirse bajo las olas de lo que actualmente se llama Océano Atlántico, a ciertos sacerdotes y sacerdotisas (no-ascendidos en aquel entonces) se les permitió el privilegio de utilizar el vehículo de sus propios corazones y las energías de sus propias corrientes de vida para sostener las Llamas de las Virtudes que, a lo largo de muchas largas eras, habían sido atraídas a la atmósfera de la Tierra. Serapis Bey, siendo uno de tales sacerdotes, recibió la oportunidad y obligación de transferir a la tierra de Egipto la corriente de energía ascendente (Llama de la Ascensión), dentro de la cual estaban entretejidas todas las oraciones, Aplicaciones, servicios espirituales y sentimientos ascensionales propiamente dichos de cada corriente de vida que la había utilizado hasta ese momento. Él y su Hermandad navegaron hasta un sitio a casi ochocientos kilómetros Nilo arriba, y establecieron la Llama de la Ascensión en Luxor (Egipto). Al momentum de esta Llama de la Ascensión se añadió los siglos de oración, aplicación y logro victorioso Divino de cada ser que ha ascendido hasta el día de hoy.

El amado Serapis (en aquel entonces no-ascendido) pidió permiso a la Ley Cósmica para reencarnar muchas veces en Egipto con el propósito de servir a esta Llama de la Ascensión; y, junto con sus seguidores particularmente dedicados, finalmente construyó un templo glorioso alrededor de dicha Llama. Pasaron los siglos, Egipto entró a sus “edades oscuras” y el Templo de la Hermandad Blanca fue gradualmente camuflado para propósitos de protección, construyendo la Hermandad cámaras subterráneas en las cuales efectuar sus ritos sagrados. Actualmente sólo queda un edificio, el cual es la entrada al Templo de la Ascensión y a la presencia de su poderoso Jerarca, Serapis Bey.

Las pocas corrientes de vida no-ascendidas que son invitados a Luxor son examinadas en cuanto a su motivo, y se les da oportunidad de aprovecharse de los ejercicios, las disciplinas y la instrucción de la Hermandad del Templo de la Ascensión, a fin de elevar la actividad vibratoria de sus cuatro vehículos inferiores y conscientemente ascender a la Perfección de su propia Presencia “YO SOY” individualizada —cuya perfección una vez conocieron y experimentaron. Sorprendería a muchos ver a los elementales utilizar esa corriente de energía ascendente para auto- liberarse de la atmósfera discordante de la Tierra,

EL ÉXODO ATLANTE

(Febrero de 1957) Hablar de la fundación de nuestro amado Luxor nos trae memorias que, siendo dulces, están llenas de una nostalgia que siempre acompaña a las “despedidas” del hogar, de seres queridos y de rutinas familiares que han conformado el patrón del propio vivir en este mundo de la forma. En vista de que el edicto del Padre Eterno es UNIDAD y UNICIDAD, aquello propugna la separatividad y las despedidas está contra la naturaleza del corazón y, al igual que ocurre con todas las inversiones de la Ley, genera dolor al experimentarlo.

Entre los individuos que navegaron Conmigo desde las dulces islas de lo que quedaba de la gloria de Atlántida, están algunos que todavía no han ascendido, quienes están hoy interesados en Nuestra nueva actividad. En total, cien navíos de la gran Flota Atlante hicieron a la mar para llevar las Llamas de las Virtudes del Altísimo ellos habían magnetizado y sostenido a lo largo de los siglos. Muchos fueron hacia el oeste y se asentaron en la vecindad de las Islas Pascua, Perú y México. Otros se aventuraron aún más allá al otro o del inmenso Pacífico a Asia. De los cien grupos que originalmente se hicieron a la mar, sólo diez llegaron a sus diversos destinos con el foco de su Llama intacto, el cual contiene consigo hoy una parte del Sagrado propiamente dicho oriundo de los Templos Atlantes. Estas llamas vinieron con nosotros en los grandes braseros dorados que solían colgar encima de los altares en aquella época.

Después del establecimiento de una parte de la Llama de la Ascensión en Luxor, cada uno de nosotros terminó su término de vida esa encarnación. Muchas veces después de eso, algunos de nosotros regresamos y encarnamos en Egipto, en los alrededores de Karnak y Luxor, para servir de nuevo a la Llama que tanto amábamos En aquellos días, no era necesario contar con disciplina escrita, ya que recordábamos bien la pureza y honor de los sacerdotes y sacerdotisas de la Llama. Sólo en la medida en que la luz de la Época Atlante se fue apagando, antes de los días de Moisés, fue que la Jerarquía insistió en escribir las disciplinas para el neófito, a fin de preservarlas a través de estos días oscuros.

La mayoría de los primeros israelitas fueron huéspedes de nuestro templo. José (quien, a través del faraón, habría de elevarse trono de Egipto), Moisés, Aarón, Miriam y todos aquéllos que habrían de tener un papel preponderante en el Éxodo. Los amados Jesús, María y Saint Germain también fueron huéspedes de nuestro Retiro en su día. La Ley Hebrea incorpora en gran medida las instrucciones impartidas en el templo, y mucho de la Ley Mosaica fue incrustado en la conciencia de Moisés mucho antes de su ascenso al Monte. Es de esa manera que la Verdad es transmitida de corazón a corazón, y luego llevada por los pies de los hombres a lugares muy lejanos.

LIBERAR LA VIDA A PUNTA DE AMOR

(Febrero de 1957)

Durante este período de treinta días, al tiempo que Luxor abre las puertas de su templo a las masas de la gente (que acude a Nosotros en sus cuerpos sutiles mientras que el físico duerme), todas las noches hablaré acerca de la Ley de la Vida, y todos los que me escuchen recordarán al menos algo de las Verdades de las que se hable. ¡Así lo decreto! Saludos, bendiciones y amor desde el corazón de Luxor. Es menester que ustedes, que conscientemente se han ofrecido de voluntarios para unirse a nosotros en el servicio a Dios, acepten como su consigna la palabra UNIDAD, incorporando servicio altruista y cooperación amorosa para LIBERAR LA VIDA A PUNTA DE AMOR.

La conciencia de todos los Hijos e Hijas del Cielo está lista para poner la plenitud de su propósito y designio bajo su custodia para Iluminación de las almas que a tientas buscan el Camino. La mecánica de lo que esta comprensión ha traído a la conciencia de la humanidad, yace bajo Mi jurisdicción. Tenemos un solo pensamiento en mente: ¡ llegar a la gente! Tenemos un solo sentimiento que motiva nuestras actividades: ¡liberar la vida a punta de amor! De ahora en adelante, Me esforzaré por ayudarles tanto como me sea posible en hacer de ustedes un INSTRUMENTO IMPERSONAL a través del cual esta comprensión pueda ser dispensada rápida, clara y universalmente. Para nada nos ocupa el engrandecimiento personal, y sabemos que a ustedes tampoco.

ADVENIMIENTO DEL ÁNGEL MICAH

Para este propósito, ya ha venido a ayudarnos el Gran Ángel Cósmico de la Unidad de Espíritu, Propósito, Motivo y Designio el Ángel Cósmico Micah. A través de la fundición de los seres separados en una UNIDAD DE PROPÓSITO UNIPUNTUAL, el fuego blanco de humildad y amor, podremos crear un poderoso canal de fuerza y pureza, a través del cual el mundo de Dios podrá, ser incorporado en los corazones y almas de los hombres por doquier; y por la aceptación y uso de esa “palabra” EN ACCIÓN, Nuestra Luz se erigirá en el mundo y atmósfera de todos aquéllos que sinceramente la quieran y la reciban.

LA IMPORTANCIA DE LA MÚSICA

(Febrero de 1957)

Para propósitos de esta instrucción, quisiera elaborar sobre la emanación natural del sonido musical que conforma la Música de las Esferas. Cada corriente de vida que pertenece a este universo, que ha alcanzado la victoria de la Ascensión, cada Ser Cósmico y Presencia Maestra es un factor contribuyente a este mar de música que, cual la Luz misma, conforma la atmósfera de las octavas de Luz. La amada Presencia “YO SOY” de cada ser no-ascendido también emana su particular llave tonal dentro del ámbito en que opera antes de la Ascensión del ser externo.

Es desde este mar de Luz que los Maestros extraen las exquisitas melodías que enfocan a través de los Templos de la Música bajo la dirección de Seres Angélicos, quienes la amplifican mediante su propia vida, y la dirigen hacia ciertos compositores en la Tierra quienes son dignos de inspiración y asistencia más-que- ordinaria. Ellos también la orientan hacia artistas que han desarrollado (a través de siglos de dedicación al Espíritu de la Música) sensibilidad a las corrientes espirituales que puedan fluir a través de actividades musicales específicas (óperas, etc.). Esta gente usualmente es lo suficientemente afortunada como para que se les permita entrar a alguno de estos Templos de Música en sus cuerpos sutiles por la noche mientras que su cuerpo físico duerme. Las gloriosas melodías desde los Ámbitos Superiores, de tal manera “reducidas” por tales buenos hombres y mujeres, son el resultado de este empeño en el cual Yo personalmente estoy extremadamente activo.

Cuando un compositor (por ejemplo, Wagner) recoge melodías desde un Templo de la Música, usualmente alguno de Maestros allí presente dirige Su Rayo personal a la mente del compositor, esforzándose por permitir que dicho compositor construya una historia apropiada alrededor de la música. Verán, el estado de desarrollo del cuerpo interno que recibe la impresión de la historia y el desarrollo del cuerpo emocional que es el receptor del sentimiento y tema de música, contribuirán en gran medida a los resultados finales. Algunos compositores hicieron cosas maravillosas con las interpretaciones musicales, pero fueron incapaces de recibir indicaciones mentales claras concernientes al “cuento” de la ópera; y la historia resultante no verdaderamente representativa de la música del tema.

CISNE MÍSTICO

En el caso de las composiciones de Wagner, contamos con la asistencia de su cuerpo mental y, así, las iniciaciones cósmicas fueron entretejidas a lo largo de todas sus obras. Claro está, ustedes están familiarizados con el hecho de que la insignia de los Caballeros de Mesa Redonda era el cisne, el cual representa al iniciado capaz de elevarse por el aire, de dominar el elemento emocional del agua y, a través de las facultades particulares del cisne (largo cuello y aguda visión), penetrar bajo el agua y descubrir también los elementos de “lo profundo”. Una y otra vez, Wagner utilizó el cisne como símbolo de las iniciaciones místicas. La antigua mitología noruega habla de como los nobles de aquella época cantaban su “canto del cisne”. Hoy en día la gente interpreta eso como el reconocimiento de fracaso, derrota sometimiento al destino, pero en aquellos días tempranos, a los “grandes” se les permitía entonar el “canto del cisne” cuando concluían las batallas de la Tierra, para indicar que se habían convertido en iniciados y que estaban ascendiendo conscientemente desde las limitaciones de la “materia” a una nueva liberación.

Cuando quiera que se canta una ópera, la cualidad o virtud que constituye su tema predominante es amplificada en gran medida por el Templo de Música y sus acompañantes; y, desde el foco central donde tal música se presenta, ángeles Devas, huestes seráficas y querúbicas dirigen y a menudo llevan la energía elevadora y armoniosa de esa ópera al tiempo que es ejecutada, a la ciudad, estado, nación y por toda la Tierra. Grandes edificios (casas de ópera, etc.) en los que se han ejecutado y cantado las magníficas obras de los genios musicales de la raza, siempre están presididas por ángeles devas y constructores de la forma que cooperan con el Deva oficiante del Templo en este servicio.

Lohengrin es primordialmente la historia de FE. El aspirante (Elsa) comparece ante el Tribunal Kármico. Su padrino (y rayo gemelo) viene a pararse a su lado y le da la asistencia espiritual que ella requiere. El llega cabalgando sobre el lomo del cisne (poderes místicos, controlados por la auto-maestría). Ella tiene que aceptarlo por lo que él vale, sin curiosidad —lo cual ella hace. Luego viene la PRUEBA, durante la cual a Ortruda y Telramundo se les permite instigar la duda en su mente en cuanto a la verdadera identidad de su amado. Desafortunadamente, ella acepta sus sugestiones de duda, y renuncia al derecho de contar con su presencia y ayuda. Lohengrin llama a su cisne y le ordena que permanezca para ayudar a Elsa en una capacidad menor, ya que tal es la misericordia del amor. Sin embargo, ella ha renunciado a la presencia de su amado (Lohengrin) al menos por mientras.

De esta manera cada estudiante se encontrará solo algún día y, con sólo la Luz de su corazón como guía, le tocará decidir acerca de la naturaleza de su maestro, no por su nombre, su persona ni su herencia. En este momento, todas las fuerzas de duda e incertidumbre surgirán desde dentro y fuera del mundo del estudiante. Este es el momento crucial en la vida del chela que ha sido escogido para una asociación más-que-ordinaria con un Maestro de Luz. Si a la duda y a la incertidumbre se les permite obstaculizar la aceptación del maestro por parte del estudiante, así como Lohengrin hubiera sido para Elsa, ese maestro tendrá que retirarse y una luz menor se convertirá en la presencia guardiana de la corriente de vida hasta un momento posterior.

CARTA MENSUAL A LAS CLASES DE TRANSMISIÓN DE LA LLAMA

16 DE FEBRERO DE  1957

“YO SOY” agradecido que las experiencias de vida sean tales que ustedes deseen, al fin, completar su ciclo de nacimiento y re-nacimiento y que estén dispuestos a cooperar —de acuerdo con su Luz— con quienes pueden ayudarlos (¡y los ayudarán!) ¿Se dan cuenta de que un mapa progreso del hombre promedio en el transcurso de un año luciría como la subida y bajada del mar —toda emoción constructiva, pensamiento, memoria, palabra y acción elevando acción vibratoria de esa corriente de vida y, por el contrario, la actividad discordante volviendo a bajarla de nuevo? Estamos en proceso de enseñarles cómo sostener esa CORRIENTE ASCENDENTE de energía mediante el uso de sus propios cuatro cuerpos inferiores, dirigidos por su libre albedrío dado-por-Dios.

Un padrino desde el Templo de la Ascensión los ayudará en este servicio (siempre y cuando lo invoquen a diario), de manera ya no es necesario que se den la caída, y la subida de las vibraciones de su energía, sino más bien la manifestación de un aceleramiento sostenido en la actividad vibratoria de todos sus vehículos. Aprovechen la proximidad de la Llama de la Ascensión y de su fiel Jerarca Serapis Bey. SIENTAN la liviandad de esa Llama, y permítanle ayudarlos. Yo decreto que todo temor a la auto- disciplina sea eliminado de ustedes, y que el JÚBILO que experimentan en el Templo de la Ascensión los haga continuar visitándolo… ¡hasta que su propia amada Presencia “YO SOY” los llame de vuelta a Casa!

AFIRMACIÓN PARA LA CLASE DE TRANSMISIÓN DE LA LLAMA DEL 6 DE FEBRERO DE 1957

YO SOY — inhalando / absorbiendo/ expandiendo/ proyectando-— el sentimiento — del poder — elevador — de la Ascensión — del amado — Serapis.

Jerarca del Templo de la Ascensión: Serapis Bey, Chohán del Cuarto Rayo.

Color de la Llama de la Ascensión; Blanco

Llave Tonal: Liebestraum de Franz Liszt

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INSTRUCCIÓN GRUPAL PARA LAS CLASES DE TRANSMISIÓN DE LA LLAMA | FRANCÉS K. EKEY

16 DE FEBRERO DE 1957

Amados amigos de Amor, que preparan los senderos de Luz para la gente de la Tierra:

Dios los bendice en su tarea voluntariamente asumida de ayudar a despejar el camino para quienes habrán de venir después de ustedes, buscando su “hogar” de belleza, felicidad, suministro ilimitado de toda cosa buena, y paz eterna, anhelados y orados por todos los hombres desde la susodicha “caída del hombre”. Invocamos ahora a cada uno de ustedes a título individual, la plena gloria de ese bello y Todopoderoso Dios Padre-Madre, toda la perfección que ustedes una vez conocieron con el Padre antes de que el mundo existiera.

Anteriormente hablamos acerca de que la Voluntad de Dios es el bien para toda la humanidad. Luego, si Dios es Todopoderoso y Su Voluntad es el bien, ¿Cómo esta amada gente llegó a su actual expresión de tanta aflicción? Pues, debido a su uso del don de libre albedrío con que ese Dios Padre-Madre dotó a la humanidad en el principio. Ese libre albedrío estaba supuesto originalmente a ser utilizado para crear, sostener y expandir únicamente bellos patrones de sustancia en belleza de diseño y textura para el uso deleitable de todos. Cuando las sombras cayeron sobre la Tierra y la gente olvidó su Fuente así como también la razón de este uso constructivo del libre albedrío, la limitación de las formas creadas en las sombras de inundados y destructivos pensamientos y sentimientos comenzó a ser lo prevaleciente, continuando a lo largo de las eras, cada vez menos y menos perfección. Por tanto, la humanidad misma, es LA CAUSA de los predicamentos actuales en que está viviendo hoy, todo producido por el alejamiento deliberado del Dios de Amor que la hizo y de Su camino de Pureza y Perfección, que los seres humanos conocieron en el principio.

A fin de sostener un universo magnífico y bien ordenado como el que vemos a nuestro alrededor —particularmente por las noches al contemplar la miríada de estrellas que componen la “Vía Láctea”— tiene que haber algunas Leyes reguladoras que las gobiernan y las mantienen en sus sitios asignados, manifestando su propio Plan Divino perfecto. De esta manera fueron dadas las Leyes de Vida a la humanidad en el principio de su advenimiento a este planeta siendo la “Regla de Oro” una de las más importantes y quizás la recordada de todas. “Los Diez Mandamientos” también son parte de esas leyes y, por cierto, nadie jamás ha “quebrantado” ninguno de dichos mandamientos. La humanidad está toda “quebrantada” cuanto a salud, finanzas, felicidad y en todo otro aspecto de desobediencia a esos mandamientos… ¡pero los “Diez Mandamientos” se yerguen hoy tan “inquebrantados” como lo estuvieron cuando por primera vez emanaron de Dios!

Ahora bien, se está dando una liberación muy misericordiosa y expedita —así como también alivio— de las condiciones en que seres humanos se encuentran hoy —individual y colectivamente.. único que tienen que hacer es volver conscientemente su atención de vuelta al Dios amoroso que los hizo, quien, por cierto… ¡no está muy lejos.! Esa, vida de la Presencia de Dios (que es la conciencia de ustedes) está anclada justo dentro del corazón palpitante de cada uno; y si obedecemos el mandamiento que nos ha sido dado, Estad quietos y conoced que yo soy Dios” volveremos a tener nuevamente la paz mental, la salud del cuerpo y el suministro en nuestros asuntos, al tiempo que rítmicamente continuamos con dicha práctica.

PREPARATIVIDAD

En el número de Enero (1957) de nuestro Diario el Maestro Saint Germain habló de “preparatividad”. Hay una bella manera de estar preparado en la cual puede que la gente ni piense al respecto. ¡Se trata de la “preparatividad” para perdonar! En vista de todos los que todavía estábamos en este mundo hemos cometido errores y le hemos hecho mal a alguien, en algún momento y lugar, ¡acaso no sería apropiado que cada uno de los que hollamos el Sendero de la Luz nos auto-entrenemos este año para “estar listos”, listos a perdonar, especialmente si ese sentimiento no nos viene fácil? Saben, errar es humano, perdonar es Divino”. Cuando alguien pide perdón, seamos rápidos en darlo ya que de esta manera, logramos un perdón más expedido de nuestros propios errores de parte de la Gran Ley. Recuerden la oración de Jesús: “Perdona nuestras ofensas, así como nosotros perdonamos a quienes nos ofenden…” y así como la Ley opera, amables lectores. Si les resulta difícil auto- perdonarse y perdonar a otros, usen, usen, usen la bendita Llama Violeta Transmutadora a diario y acepten el sentimiento del Perdón Crístico…. ¡ya que tal es su mismísima naturaleza! ¡Compruébenlo! ¡No cuesta nada, y de que trabaja, trabaja! El uso persistente de esa Llama nos hará y mantendrá listos para realizar nuestro Plan Divino aquí, para luego “entrar al Júbilo de Nuestro Señor” al final del camino.

Preparándome para un mayor servicio a la vida,

FRANCÉS K. EKEY

El Puente a la Libertad – Serapis Bey

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