La Luz cósmica universal es como un gran órgano y cada hombre, mujer y niño encarnado, tiene acceso a sus grandes tubos a través del teclado individual de sus propios mundos mentales y emocionales; cada uno ejecutando en dicho teclado, sus armonías o disonancias. El sonido agregado forma los tonos emitidos por el Planeta al Universo a su alrededor y sea dicho en verdad que, el sonido que se eleva desde la Tierra es un llanto de dolor, incertidumbre, cansancio y cuestionamiento.
Cuando una Corriente de Vida se individualiza, se convierte en un factor inmediato en la vibración de su planeta y su propio teclado nunca volverá a estar callado mientras que mantenga alguna vestidura de pensamiento o sentimiento, las controle el individuo o no. La Luz universal está siendo puesta en movimiento constantemente por la presión de cada Corriente de Vida, consciente o inconscientemente y esa es la razón del caos y la confusión actuales ya que todos viven dentro de este “sonido insonoro”, disonancia y caos de los ritmos partidos de las Corrientes de Vida dormidas.
Cuando una Corriente de Vida llega realmente a aceptar el hecho de que no puede de forma alguna desasociarse de la responsabilidad de tocar algún acorde y tecla en la Armonía universal mediante cada respiración, pensamiento y sentimiento; es entonces que comienza a entender su responsabilidad hacia el Todo, así como la importancia de contribuir al máximo que sus posibilidades le permitan, con algunas notas constructivas y progresivas que serán sentidos por las masas y que serán una grata descarga y alivio de las contribuciones de los muchos.
¿Acaso no veis mis Benditos que el control consciente de vuestra energía en un manera armoniosa, es uno de los medios más grandes por los que podéis asistir en la redención de éste Planeta, de manera que la Tierra pueda, una vez más descargar su Tono cósmico en la sinfonía del Universo?
Electrones – Amado Mahá Chohán, Santo Aeolus