Esta mañana, al tiempo que cientos de miles repiten el “Padre Nuestro” ¡puedo nombrar quizás a cien que realizan la eficacia dentro de dicha oración!
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros – esto, es a través de ustedes – tu reino, así en la Tierra como en el Cielo ¡Amados Míos, piensen esto! Perdona nuestras ofensas ASÍ COMO nosotros perdonamos a quienes nos ofenden. Siempre se tiende a pasar a toda velocidad por el “así como”. Oh, sí por supuesto que queremos ser perdonados, pero lo seremos en la medida que primero perdonemos a quienes nos hayan ofendido. Luego la magnífica rendición, tuyo es el reino, el poder y la gloria por siempre Señor. ¿Siente verdaderamente esta rendición, esta abnegación?
Esta semana desarmen esta oración en versión católica o protestante como mejor les venga, y pídanme que les pruebe en sentimiento ¡y lo haré! ¡Esa es Mi razón de ser!
¿Sabías que hay un mensaje secreto en la oración del Padre Nuestro? Haz clic aquí para conocerlo.
Tomado del libro: Diario del Puente a la Libertad – Jesús
Serapis Bey Editores
Gracias Gabriel, que la luz y el amor se encuentren contigo siempre
Ya lo imprimi
Gracias.
Con amor