La facultad visualizadora de la mente crea el patrón o el pensamiento-forma que es sostenido dentro de la conciencia, inquebrantablemente, con el conocimiento cierto de que el pensamiento-forma dentro de la conciencia tiene que reflejarse sobre la pantalla de la vida como una manifestación física. Pero ningún pensamiento jamás se convierte en cosa alguna hasta ser llenado con la sustancia del sentimiento; y la energía controlada de la corriente de vida, calificada armoniosamente y vertida dentro de esa forma, la llena con la esencia de vida del universo y la baja a la manifestación como una expresión armoniosa de precipitación directa.
Es aquí donde los científicos mentales y ocultistas encuentran su escollo. Ellos saben que el pensamiento es un proceso creativo y que afecta la manifestación, pero no han aprendido que el sentimiento es el poder calificador de la acción vibratoria del pensamiento-forma, que le da cualidad.
Recuerden: El pensamiento es la idea —es la forma— la silueta y la copa. El sentimiento es la vibración inicial que pasa a través de ese pensamiento-forma y establece el ritmo del electrón dentro de ese pensamiento-forma, el cual ellos siguen obedientemente hasta que la manifestación ocurre.
Padre, Madre e Hijo
El pensamiento es el padre, el sentimiento es la madre, y la forma manifiesta, el hijo o la creación. El pensamiento tiene que pasar por la naturaleza emocional para convertirse en una forma creada. La cualidad del pensamiento es influenciada por el útero del sentimiento, y la creación traída adelante está revestida con la naturaleza del útero en que reposó.
A través del cuerpo mental, es posible moldear cualquier idea que emerge de la Sustancia- Luz Universal. De la naturaleza emocional se extrae la acción vibratoria que constituye el aliento o pulsación que le da vida al pensamiento-forma, y a través del vehículo físico pasa la sustancia de los tres elementos —la cual conforma el abrigo o capa de las creaciones.
Electrones y Rayos
La Sustancia-Luz Electrónica que llena el universo es el Cuerpo de Dios, y dentro de cada electrón hay un punto de luz que es auto-consciente e inteligente. Desde esa chispa dentro del electrón, emanan pequeños rayos que conforman la radiación del electrón. Cada diminuto electrón, magnificado cientos de veces, luce como el Cuerpo Electrónico de la Presencia “YO SOY” con los rayos emanando a su alrededor.
A la corriente de vida auto-consciente —Ascendida o no ascendida— se le ha dado la Autoridad Divina para comandar estas diminutas partículas electrónicas para que asuman forma de acuerdo con el designio del pensamiento-forma creado mediante el poder de visualización.
La naturaleza emocional de cada corriente de vida ha sido dotada por Dios-Padre para dar vida a los pensamientos-forma, pasando la acción vibratoria de la naturaleza emocional a través del pensamiento-forma y poniéndolo en movimiento —de la misma manera que Yo paso el aliento de vida a través del infante y pongo a pulsar la forma física.
Sin el aliento de vida, la forma del bebé no podría asumir una existencia activa y se desintegraría.
Sin la naturaleza emocional pasando a través del pensamiento-forma, éste se desintegraría y regresaría a Lo Amorfo. Es de esta manera que sin sentimientos, las formas no tienen poder sostenedor y no se convierten en cosas.
Diario de El puente a la libertad de el Mahá Chohán