Es sólo cuando permitimos que la atención comience a centrarse sobre una expresión de lo externo que le habremos dado poder para perturbarnos. El asumir instantáneamente la postura de que no hay personalidad — sólo hay Dios en acción— evitaría que el “aguijón” de la ignorancia encontrara su blanco. La ignorancia, al igual que una avispa, siempre quiere utilizar su aguijón, pero no sabe dónde encontrar un blanco a menos que tú le perturbes su nido. Y nadie en su sano juicio hará eso si conoce la naturaleza de la avispa. El Amor Divino es la naturaleza original en todo ser humano. Los sentimientos o actividades inarmoniosas no son más que energía mal aplicada que trata de alcanzar algo a la fuerza, lo cual sólo puede tener permanentemente mediante una acción amable y armoniosa.
EL AMOR
Si el ser humano tan sólo reconociera que el Amor de Dios es el poder motivador natural de su ser, inmediatamente vería que su intento de usar la energía sin calificarla con este Magno Poder de Amor Divino tiene, en consecuencia, que acarrearle justamente el resultado opuesto al que desea. Por lo tanto, que todos abran sinceramente la Puerta a todas las expresiones, a todas las actividades; y encontraremos nuestro mundo transformado y moviéndose dentro de una Armadura de Protección donde sólo imperan la Luz, la Paz y la Armonía.
Lo primero sencillamente esencial en el uso constante de la Magna Energía Constructiva es que te determines a moverte únicamente en el Sagrado Esplendor de tu Magna Presencia de Dios. A través de muchas experiencias inferiores hemos visto a menudo lo que podemos hacer cuando tenemos la suficiente determinación de llevar algo a cabo. En la determinación de utilizar el poder constructivo —que es Dios en Acción— habremos liberado entonces la más poderosa Fuerza en el Universo para actuar por nosotros.
En el momento en que nos hacemos conscientes de la Energía de Dios, la ponemos en movimiento. En su estado infinito, es estática. Conscientemente dirigida, es dinámica. Esta es la razón para demandar el uso consciente del entendimiento. Este es el punto sutil en que los individuos caen en un estado de apatía, y debería evitarse como se evitaría una serpiente venenosa.
Tomado del libro: Instrucción de un Maestro Ascendido – Saint Germain – pag 56
Bendito Saint Germain y su maravillosa LLAMA VIOLETA
el Amor lo puede todo
Moviendome en la Magna Presencia de Dios Amor