Amados co-trabajadores en traer el reino de los cielos a la Tierra, me dirijo a vosotros de ésta manera porque vuestro inteligente entendimiento de nuestras explicaciones de las actividades cósmicas ha sido de una gran ayuda para Nosotros y porque vuestros llamados y vuestras clases de transmisión han tenido mucho que ver en adelantar la evolución de la Tierra.
La expansión y el desenvolvimiento de la belleza y la gloria de la Ley espiritual cósmica, gobierna todos los Universos en todas las galaxias de la creación. No existe nada que sea una expresión extática de la vida. Las estrellas, soles y planetas, con cada latido de sus corazones cósmicos, expanden sus Auras y esferas de influencia a un mayor grado de en el Sistema solar. Así como un infante estira sus miembros para asegurarse su crecimiento, así esos Señores planetarios cósmicos expanden la substancia cósmica mediante su aliento, intensifican e incrementan la luminosidad de sus Focos particulares en la galaxia en la que Ellos se están expresando a sí mismos. Las grandes mentes que crearon un Universo, no saben ni de espacio ni de tiempo (en términos humanos). Esos grandes Focos divinos, vistos en el Cielo son fluídicos porque la expansión del sistema solar entero conoce una cierta elasticidad de desenvolvimiento y el sistema corresponde automáticamente y coopera en una proporción igual, de manera que no pase ningún “accidente” o confusión en su crecimiento espiritual.
Regresando a la esfera más pequeña donde ahora vosotros moráis queridos corazones, tenéis hoy día, evidencia (a través de los esfuerzos del hombre por sobreponerse a los peligros de vivir en el espacio exterior) de lo que vuestros llamados están haciendo para la expansión de la Tierra. La Luz electrónica que ha sido enviada hacia adelante a través de vuestros llamados, ha causado una aceleración en el estiramiento hacia arriba y afuera de las grandes mentes científicas de la Tierra, ha causado un rompimiento de los lazos aprisionadores de la Tierra y ha hecho mucho en términos de ayudarla a que asuma su lugar correspondiente en nuestro sistema solar. Mi gratitud y bendiciones son suyos. Tal cual se os ha dicho, no sólo hay un balance que alcanzar en el Registro universal, sino que hay un servicio que la Tierra TIENE que realizar para Universos que no han nacido todavía, el cual sólo se puede dar cuando el planeta entero vierta hacia adelante más y más Luz. La suma total de substancia de Luz electrónica que se requiere para ser descargada por la Tierra, sólo se puede lograr cuando todas y cada una de las Corrientes de Vida que usan la Tierra como su salón de clases vierta el máximo de su capacidad lumínica.
Una vez más, hago una pausa para decir-Gracias-a todos y cada uno de vosotros (en realidad un pequeño puñado de servidores de la Luz, cuando lo comparamos con la población de la Tierra) por lo que estáis haciendo por éste planeta Tierra. Como sabéis, incontables cientos de miles de toneladas de la esencia de primigenia de Dios (pre ordenada para ser la Luz de la Tierra), han pasado a través de todos y cada uno de vosotros y ha sido mal usada. Cada electrón de esta substancia ahora debe ser redimido, vuestro buen trabajo hacia la redención de esta substancia es visto y apreciado no sólo por los Maestros ascendidos, sino también por los otros miembros de éste sistema solar y de la galaxia entera, quienes están pacientemente esperando a que la Tierra obedezca el Fiat cósmico de que dé más Luz. Os traigo el Amor y las bendiciones de Ellos.
Electrones – Amado Mahá Chohán, Santo Aeolus
