Volteemos ahora nuestra atención a las cualidades de Dios y sus expresiones. Vosotros habréis de caer en cuenta que dichas cualidades y expresiones de virtud son relativas. Dicho de otra manera, las cualidades y expresiones están determinadas por la capacidad dentro de la Corriente de Vida, para descargar energía calificada constructivamente desde su propio momentum acumulado a través de las edades para enriquecer el Universo.
Por ejemplo, la Luz descargada por el Sol es de un volumen considerablemente mayor que la Luz de una estrella debido a la distancia en que se encuentran las estrellas. La Ley que gobierna la creación no obstante, requiere del hombre que su virtud llene el Universo según su capacidad. La capacidad de servir, de emitir Luz hacia adelante, es el factor determinante mediante el cual el Ser Superior y la jerarquía espiritual miden el progreso o atraso del Foco divino individual dentro del hombre.
Ni Dios, ni el hombre desarrollado espiritualmente esperarían más de alguna Corriente de Vida en particular que lo que las capacidades y talentos innatos en ella lo permiten. Así, la muy tímida Luz del Alma de una persona, puede ser lo mejor que esa Corriente de Vida puede ofrecer, mientras que una emisión de Luz mucho mayor de otra Corriente de Vida más evolucionada y responsable podría quedarse corto del requisito mínimo del beneficio universal que dicha Corriente de Vida podría ofrecer al Universo, para devolver el saldo por el bien recibido.
Ningún hombre debería tratar de servir más allá de su capacidad ya que, cuando el equilibrio de la naturaleza espiritual es perturbado, el individuo debería esforzarse por recuperarlo antes de gastar su energía en el altar de la humanidad. El Chela, por supuesto, cae en cuenta que es su responsabilidad personal la de sostener dicho balance y equilibrio a través de la aplicación, aumentado así su capacidad de servir.
El mundo de la forma no requiere de un infante el balance a la Vida en la forma de algún servicio constructivo para enriquecer la causa de la Humanidad que es esperado de un individuo que ha alcanzado tanto su mayoría de edad, como ciertos beneficios de educación y misericordia que han enriquecido su conciencia, igualmente ha expandido su capacidad de servir.
Un momento de introspección os mostrará que cualquier individuo que ha recibido la instrucción, radiación y bendiciones de los Maestros-Al haber aceptado tal instrucción-ha incrementado su capacidad de servir y una persona así se convierte en responsable ante la Vida por un mínimo mayor de servicio que la humanidad en general.
Electrones – Amado Mahá Chohán, Santo Aeolus