¡Oh Magno Dios, el Más Poderoso de los Poderosos! ¡Presenciamos Tu Amanecer! Nosotros tus hijos presenciamos el amanecer del Alma, y recibimos Tu Poder Todo-Sostenedor, Tu Valor, Tu sabiduría Tu Presencia Iluminadora. ¡Oh Magna Energía! Aceptamos Tu Presencia, esa “Presencia” Todopoderosa y Activa que anima nuestra mente y nuestra forma, ¡Tu Magna Inteligencia! Aceptamos Tu Actividad Todopoderosa dirigiendo todo movimiento de la forma externa, reteniéndola cerca mediante Tu Magno Abrazo.
Tomado del libro: Instrucción de un Maestro Ascendido – Saint Germain